Gamificación, aprender jugando ¡es posible!

¿Te cuesta que tus alumnos se interesen por los contenidos a trabajar? ¿Se aburren fácilmente y pierden la atención? ¿Avanza el curso y te gustaría sorprenderles con algo nuevo? Hoy te proponemos una alternativa para fomentar su motivación. Hablamos de gamificación. Se trata de una técnica de aprendizaje que combina los contenidos educativos con técnicas de juego para despertar el interés de los alumnos y facilitar la interiorización de los conocimientos. De esta forma, lo que a priori puede resultar un trabajo aburrido o tedioso para ellos, se convierte en un espacio que fomenta su motivación y concentración y les ayuda a implicarse para conseguir los objetivos educativos propuestos.

Es habitual relacionar la gamificación con el ámbito digital aunque es una metodología que también se puede realizar a través de técnicas analógicas, como las flashcards o los tableros de juego manipulables. A continuación te describimos algunos elementos básicos para gamificar tus sesiones en el aula comenzando por establecer los objetivos y contenidos educativos a trabajar.

¿Por dónde empezamos?
Lo primero es definir unas reglas del juego para que el trabajo se realice con orden y coherencia y no olvides establecer las limitaciones, premios, turnos de participación etc, todo eso te ayudará a lograr los objetivos establecidos.

La sesión se centrará en una única narrativa o guión, una “temática marco” en torno a la que se desarrollará la acción. No olvides crear retos. La superación de esas metas es lo que permitirá al alumno adquirir habilidades y/o conocimientos. Lo ideal es proponer pequeños retos a corto plazo cuya superación suponga un gran reto a lo largo del juego. Para que el alumno sienta que avanza, conviene definir el progreso del jugador, así lograremos que los estudiantes se motiven, mientras fomentamos su esfuerzo y dedicación.

Llegó el momento de la competición, entendida de forma colaborativa y sana. Y llegamos al final del juego habiendo superado los diferentes niveles de dificultad propuestos y, por supuesto, reconociendo el trabajo del alumnado recompensando su esfuerzo y desempeño por las acciones bien hechas o completadas. Esto último ayudará a establecer hábitos de trabajo a los alumnos.

¿Y cómo se materializan estos elementos?

A continuación te resumimos los componentes más destacados que se pueden llevar a cabo.

Logros: que los alumnos deberán obtener a través de diferentes acciones propuestas. Es habitual que se establezca un sistema escalonado de logros por dificultad. Se pueden dividir en logros individuales o por equipos de trabajo. Han de ser accesibles para todos y ajustarse al nivel de los alumnos para que no pierdan motivación.
Insignias: representación gráfica de los logros que los alumnos deberán identificar con agilidad.
Puntos: recompensa numérica de los logros. Puede establecerse un sistema de “ganancia de puntos” pero también puede resultar interesante “la pérdida de puntos”.
Tablas de clasificación: que sirve para ordenar a los participantes según los niveles de superación de logros.
Bienes virtuales: se trata de elementos que los alumnos pueden conseguir a lo largo del juego y que le ayuda para conseguir objetivos.
Avatar: que representa al alumno.

Te preguntarás por qué en Canal Educa sabemos tanto sobre gamificación. Muy fácil, nuestro programa ofrece Actividades online basadas en esta técnica de aprendizaje, ¡no te las pierdas!
Este recurso educativo está dirigido a alumnos de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato. Se trata de una serie de juegos interactivos basados en preguntas o retos a superar adaptados al currículo escolar.
La molécula del agua, sus propiedades, el uso y gestión de los recursos hídricos, el ciclo hidrológico, paisaje, salud o clima, son algunos de los contenidos que los alumnos pueden trabajar de forma amena y entretenida.

Los juegos desafían los conocimientos de los alumnos a través de preguntas o retos a superar. Cada pantalla se complementa con pantallas emergentes que aparecen para aportar información complementaria y curiosidades que sirven para que los alumnos afiancen los conocimientos y mantengan su interés y motivación. Una barra de progreso y el establecimiento de tiempos máximos de respuesta, aportan agilidad al desarrollo de cada reto. El nivel de dificultad va aumentando según se van superando pantallas de juego.

Proponemos tres grandes bloques de contenidos para cada nivel educativo:

Primer Ciclo de Educación Secundaria:
• Las propiedades del agua
• Ciclo natural e integral del agua
• La presencia del agua en el planeta

Segundo Ciclo de Educación Secundaria:
• Mezclas y disoluciones
• La potabilización y depuración del agua
• Uso y gestión sostenible de los recursos hídricos

Bachillerato:
• Agua y salud
• Agua y geología
• Agua y clima

Al finalizar cada bloque, los alumnos deberán superar un test final que recoge todo lo trabajado. Este recurso está disponible en inglés y en castellano.

Si buscas formas de motivar a tus alumnos y de trabajar de forma diferente los contenidos, llévales al aula de informática y pon a prueba sus conocimientos sobre ciencia.